Los servicios secretos rusos podrían estar planeando deponer a Putin en plena guerra, según ‘The Times’
Por 20 Minutos / Bolivia Energía Libre-La Paz
Una especie de golpe de estado contra Vladimir Putin por parte de su círculo más cercano ha parecido siempre imposible, pero ahora quizás no lo sea tanto. Esa posibilidad cobra cada vez más fuerza, a medida que los días pasan, la guerra sigue y las fuerzas rusas se estancan. La opción la ha abierto un denunciante anónimo, según recoge el diario ‘The Times’, que cita unas misivas en las que se recopila toda esa información.
El denunciante ha contado en cartas a Vladimir Osechkin, que figura en la lista de los más buscados de Rusia por su labor de denuncia de los abusos en las cárceles, que el caos y el descontento han sumido a los servicios de seguridad tras la chapucera invasión de Ucrania.
Osechkin ha publicado casi una docena de cartas y asume que el hecho de que los servicios secretos hayan empezado a hablar en contra de Putin es una señal inequívoca de que algo se puede estar moviendo en los pasillos del Kremlin, y no precisamente a favor del presidente ruso.
Mientras, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, ha confirmado este jueves que las negociaciones con Ucrania continuarán realizándose «vía telemática». Las partes han comenzado a abordar la posibilidad de redactar el borrador de un acuerdo sobre la situación en el país, «su neutralidad y las garantirás de seguridad», ha matizado antes de aclarar que también se están abordando aspectos «militares, políticos y humanitarios».
«Esperamos que Kiev se dé cuenta cuanto antes de la inevitabilidad de llegar a una solución pacífica sobre el problema de la desmilitarización y desnazificación de Ucrania», ha aseverado Zajarova citando las palabras utilizadas por el propio presidente, Vladimir Putin, para justificar la invasión. Así, ha recalcado la importancia de convertir el país en un «Estado neutral». «Cuanto antes entiendan los representantes del régimen ucraniano esto, antes es completará la operación militar especial» que se lleva a cabo en el país, ha manifestado.
No obstante, ha lamentado que la Administración del presidente, Volodimir Zelenski, ha perdido la «oportunidad de existir dentro de sus propias fronteras y con su propia soberanía e independencia por no cumplir con los acuerdos de Minsk» con los que las partes buscaban poner fin a la guerra en el este de Ucrania.
Lo que sí se está produciendo ya en Rusia es la salida de algunos desertores de Putin, además de acrecentarse las críticas de los ya de por sí perseguidos opositores al régimen. El nombre más importante en esos huidos es el de Anatoli Chubais, uno de los principales asesores del presidente ruso renunció a su cargo por diferencias con la deriva que ha adquirido Moscú sobre Ucrania, y la BBC además anunció que había tenido que abandonar el país junto a su familia, aunque se desconoce su paradero actual. Y es que el Kremlin tiene claro que va a seguir ejerciendo presión contra quienes se salgan, aunque sea un poco, de la línea oficial que habla de «operación militar especial».