Proponen hacer de COMIBOL autárquica para repuntar la industrialización de minerales
Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz
La Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) debería convertirse en una empresa autárquica para repuntar la industrialización de los minerales, y por lo tanto, volver a convertirse en sostén económico del Estado, propuso el nuevo presidente ejecutivo de la estatal minera, Eugenio Mendoza.
“Pido al gobierno apoyo incondicional para sacar a la COMIBOL de una actividad minera pasiva, a otra más activa, para que aporte regalías e impuestos al estado. Ese será el proceso de cambio”, solicitó el nuevo ejecutivo empresarial.
La intención busca, en los hechos, consolidar reformas estructurales en la empresa, hoy sumida en una profunda crisis económica como efecto del declive de las exportaciones de minerales y una baja producción de las minas y yacimientos que se hallan bajo tutela de COMIBOL.
Una empresa autárquica implica contar con una administración descentralizada, con personalidad jurídica y patrimonio propios, integrada, además, por funcionarios públicos, que actúan con relativa libertad, con el objetivo de satisfacer una necesidad pública determinada.
“En tal sentido, la COMIBOL debe pasar de ser una empresa pasiva a una autárquica, con tecnología de punta, con normas ambientales”, describió algo el nuevo ejecutivo empresarial después que asumió el cargo a principios de semana.
Líder empresarial
Decidido a reestructurar la empresa, Mendoza dijo también que COMIBOL ingresará a explotar minerales estratégicos para la industria tecnológica mundial.
En este sentido habrá que volcar decisiones concretas orientas a producir, indio, cobalto, manganeso, cromita, tierras raras, germanio, berilio, bauxita, litio, tantalita, y aquellos vinculados al grupo del platino, mencionó.
Sin pérdida de tiempo anunció que preparará los estudios necesarios para conseguir las inversiones que se requieren para alcanzar las metas propuestas.
Lo que tiene que hacer el Estado es prestar seguridad jurídica para garantizar la inversión privada destinada a la exploración de nuevos yacimientos, la industrialización de los minerales, y por supuesto, la fundición de metales con valor agregado, señaló Mendoza.
“Solo así podremos recuperar la imagen de país minero que tiene y es Bolivia”, apuntó el presidente de la estatal minera.
El largo proceso de transformación
A pesar de compromisos hechos desde el año 2007, la COMIBOL no pudo, hasta ahora, concretar ninguna refundación empresarial.
Los diez objetivos estratégicos que la estatal minera busca consolidar son: gestión empresarial, generar ingresos y excedentes, concretar alianzas estratégicas, determinar y cuantificar las reservas y recursos mineralógicos que tiene el Estado, incrementar la producción, recuperar metales y contenidos de los concentrados, captar nuevos mercados para generar mayores ingresos fiscales para el Estado.
Entre los objetivos que persigue también se hallan generar valor agregado, diversificar el producto y promover la gestión ambiental, seguridad y salud ocupacional.
Para alcanzar estos fines, COMIBOL tendrá que convertirse en un gobierno corporativo, manejar con cierta autonomía de gestión la prospección y exploración, explotación y concentración de minerales.
Tendrá asimismo que incursionar con fuerza en la fundición y refinación de minerales, comercialización, industrialización, investigación y desarrollo pero además poner en marcha programas de mitigación del impacto ambiental que genera la extracción industrial de minerales en el Estado.