Karachipampa asegura $us 882 MM para fundir concentrados de mineral durante 15 años
Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz
La Empresa Metalúrgica de Karachipampa –en el Departamento de Potosí- aseguró inversiones por 882 millones de dólares para explotar y procesar concentrados de zinc, plomo y plata, después que el Ministerio de Minería y Metalurgia, firmó un “contrato estructurado” con la compañía financiera Innovación Financiera (KIMMAERA).
“La programación de esta inversión, a su vez dará lugar a reactivar el triángulo productivo (de otras dos plantas similares la de) Plahipo y la Palca”, informó una nota de prensa institucional que colgó el ministerio en su portal oficial sin precisar, empero, qué cantidad de dinero fue comprometido y bajo qué condiciones será desembolsado.
El acuerdo financiero tiene como objetivo concretar inversiones en las áreas de exploración y explotación, además de industrialización de los concentrados con la fundición de minerales, refiere el parte informativo.
“La suma de todo este accionar minero que compromete a toda la cadena productiva, permitirá una inversión en los próximos 15 años de 882 millones de dólares”, señaló la nota de prensa institucional.
Actualmente Karachipampa está produciendo lingotes de plomo y plata al 99.99% además de antimoniatos y óxidos de zinc, por lo tanto (la planta comenzó a procesar) subproductos que están siendo exportados al Brasil.
Como nunca paso hasta ahora, Karachipampa está lista para exportar un promedio de 300 toneladas de lingotes de plomo, aseguró la nota de prensa.
Una historia de crisis
Desde la decisión del gobierno del expresidente Alfredo Ovando Candia en la década de los años 1960, de instalar fundiciones en Bolivia, muchos fueron los proyectos para ampliar el desarrollo de la metalurgia en el país.
Los más importantes fueron Vinto (estaño) y Mutún (hierro) que no llegó a realizarse, La Palca (estaño de baja ley) y Karachipampa (plomo, plata).
De éstos el más ambicioso fue el de la fundición de plomo-plata de Karachipampa en Potosí.
El proyecto, nacido en el gobierno de facto del general Hugo Banzer en la década de los años 1970.
Karachipampa, llegó a su etapa de concreción en el gobierno también miliar del general David Padilla Arancibia con la firma del contrato para la construcción de la fundición otorgada a la empresa alemana Klockner y a la empresa belga MECHIN.
El costo final de la obra llegó a 123 millones de dólares.
Sin embargo la planta que fue inaugurada en enero de 1984 nunca funcionó debido a una insuficiencia de producción de minerales, finalización de la garantía de las empresas constructoras, carencia de capital de inversión para empezar el funcionamiento, entre otras, son las razones de la incongruencia que impidió la productividad de una planta cuya inversión fue multimillonaria y jamás encendió su maquinaria ni fundió una sola tonelada de concentrados.
Sin embargo está cadena de fracasos sin embargo al parecer quedó en el pasado por el anuncio oficial del Ministerio de Minería en sentido de que la planta comenzó a procesar concentrados de minerales.