Argentina busca aumentar la producción de gas con un estímulo a petroleras que llegará a $us 1.300 MM al año
Por El Clarín / Bolivia Energía Libre-La Paz
Lidiando contra sus diferencias intestinas, el Gobierno argentino analiza cómo estimular la producción de gas con el menor costo posible. Los aproximadamente Sus 1.300 millones anuales que costaría el Plan Gas 4, suspendido en el momento de su anuncio, serían un escollo fiscal y político insalvable para funcionarios con pudor otorgar esa ayuda directamente a las petroleras. Sin embargo, no todo está perdido para las empresas que ansían un empujón estatal, empezando por la propia YPF.
En las huestes oficiales hay consenso de que es necesario hacer algo desde el Estado para que se incremente la producción, que cayó en julio 12,2% en relación al mismo mes del año pasado. Si continúa esta declinación, se necesitarían millonarias importaciones el año próximo, con el consiguiente drenaje de dólares.
Luego de meses de negociación con las productoras, el subsecretario de Hidrocarburos, Juan José Carbajales, afinó un complejo programa de cuatro años para animar la producción local, que en lo medular implicaría que las productoras cierto volumen de gas, cuyo valor surgiría de subastas. El Estado completaría el precio hasta un valor tope, que arrancaría en US$3,5 el MBTU, y podría terminar hasta un 50% arriba. Según cálculos de distintas fuentes, ese aún impreciso aporte estatal redondearía aquellos 1300 millones de dólares cada año.
Pero en el mismo momento que el alfil del ministerio de Desarrollo Productivo ultimaba detalles con las empresas, y poco antes de hacer lo propio con los gobernadores, fue notificado de que la secretaría de Energía sería dirigida por el legislador neuquino Darío Martínez y bajo la órbita de Economía.
El golpe de timón es unísonamente interpretado en el sector como la decisión de cuidar la caja pública y de contemplar con más atención los criterios sobre el rubro de la vicepresidenta, Cristina Kirchner.
Carbajales presentó su renuncia, que aún no fue aceptada, ejemplo del cuadro incierto. Y el secretario cuya designación aún no se formalizó empezó a reunirse con los líderes de las empresas, unas veces en Neuquén, donde tendrá su otra sede, otras por la web. Líderes de PAE (Pan American Energy), Shell, Tecpetrol y Total formaron parte de la secuencia de contactos de Martínez, que comenzó con Sergio Affronti, CEO de YPF.