¿Explota la burbuja del litio? El precio de la materia estrella de las baterías se desploma y la explicación parece estar en China
Por 20 Minutos / Bolivia Energía Libre-La Paz
- Entre diciembre y febrero de 2023 el litio ha perdido casi un 30% de su valor. Alemania e Italia lideran el veto a la prohibición de coches de combustión en 2035.
Hace apenas unos meses el litio era un mineral fundamental. Es junto a las tierras raras y algunos minerales como el tungsteno, el grafito o el telurio una materia prima crítica para la economía de la transición climática. No es que el litio ya no lo sea, pero su demanda y en consecuencia su precio ha caído espectacularmente.
Si para algo es básico el litio es para la fabricación de las baterías de los vehículos eléctricos. Y esa es la clave de lo que está ocurriendo. ¿Había una burbuja? Sí y ha estallado.
En los dos últimos años hemos asistido a una carrera de los fabricantes de vehículos eléctricos por hacerse con la materia prima, con el necesario litio. Esa fiebre, esa necesidad, multiplicó por más de seis el precio del carbonato de litio y por casi diez el del espodumeno.
Esa exorbitante subida aún tuvo lugar en 2022, en varias ocasiones. Pero todo cambió cuando el año daba sus últimos coletazos. Entre diciembre de 2022 y febrero de 2023 el litio ha perdido casi un 30% de su valor en el mercado chino, el mayor del mundo para este tipo de automóviles.
Según datos de Fastmarkets, agencia de estimación de precios de materias primas, el carbonato de litio alcanzó su pico máximo a finales de noviembre de 2022, cuando cada tonelada se situaba en torno a unos 597.500 yuanes (81.389 euros), cifra desde la que cayó hasta los 425.000 yuanes (57.891 euros) el pasado 21 de febrero.
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Para hacernos una idea mejor del momento, en 2021, los precios fluctuaban por debajo de los 100.000 yuanes (14.392 dólares, 13.602 euros). Es decir, lo del litio en 2022 fue una locura o eso, una burbuja. De modo que se espera que el precio siga bajando por el exceso de oferta y un crecimiento ralentizado de las ventas de vehículos eléctricos, resume Caixinglobal.
El Gobierno chino ya tenía planeado suspender las subvenciones a la industria de los coches eléctricos. Entraron en vigor en 2009 y desaparecerían en 2022. Antes de que eso ocurriera, a finales del año pasado la demanda de este tipos de vehículos se ralentizó bruscamente.
Ya sin ayudas públicas, las ventas de automóviles eléctricos cayeron en enero casi a la mitad que en el último mes de 2022. Y, no hay que olvidarlo, el chino es el mayor mercado mundial de este tipo. La nueva situación supone un «incremento de miles de yuanes en costes» para los fabricantes en un momento de intensa competición en el sector, según la prensa local.
El analista Dylan Kelly, de Ord Minnett, afirma que «la oferta está llegando más rápido de lo que se puede decir ‘bu’. «La demanda sigue siendo fuerte, pero los precios son insostenibles desde hace tiempo», asegura a Reuters.
En 2022, la producción de baterías de iones de litio fue más del doble (+130%) que el año anterior, alcanzando los 1,2 billones de yuanes (172.749 millones de dólares, 163.187 millones de euros), según datos del Ministerio de Industria y Tecnologías de la Información de China.
La locura por el litio llegó a tal punto que el Gobierno chino envió recientemente un a equipo de funcionarios a Yichun (al este del país) ante el «caos minero» qu se había organizado. Cuenta EFE que el ansia por el litio había llevado a multitud de residentes rurales a tratar de extraer lepidolita (mineral que se emplea como fuente secundaria de litio), en lo que pareció una suerte de ‘fiebre del oro’ moderna.
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Por conseguir el mineral no sólo hubo grandes daños medioambientales en esa parte de China sino accidentes de tráfico por la presencia masiva de camiones que transportaban el material.
«El entorno macroeconómico no es favorable. Los ciudadanos (chinos) son muy precavidos a la hora de consumir, especialmente cuando se trata de algo tan caro como un coche», explica una fuente del sector de la producción de litio citada por Fastmarkets.
Los posibles compradores de vehículos eléctricos están prefiriendo mantenerse a la espera, no solo debido a la posibilidad de que Pekín anuncie nuevos subsidios sino a una guerra de precios en el sector iniciada por la estadounidense Tesla. Así lo explica al menos la Asociación de Turismos de China.
Otro dato que explica lo ocurrido es que el mercado chino está dominado por fábricas de menor tamaño. Éstas ofrecen cantidades pequeñas de litio a precios altos en un momento de gran competencia por las materias primas entre los fabricantes de baterías.
La prensa económica china cita a analistas según los cuales, los fabricantes estarían buscando posibles vías de expansión en el extranjero, con la mira puesta, por ejemplo, en el mercado europeo donde estaba previsto prohibir la venta de vehículos de gasolina y diésel a partir de 2035.
Eso iba a ser una oportunidad para los productores de eléctricos del país asiático, pero Alemania ha roto esas expectativas. Cuando se daba por hecho la prohibición europea, varios países han puesto objeciones. Ya lo habían hecho, Italia, Polonia y Hungria, pero la semana pasada y por sorpresa, se sumó Berlín.
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No parece definitivo. La Comisión Europea y el Gobierno alemán están teniendo conversaciones sobre el fin del motor de combustión. La presidenta Ursula von der Leyen aseguraba este domingo que el diálogo está siendo «constructivo». En China están pendientes.
La caída de los precios del litio en China también ha afectado a otros países productores. Las acciones de Albemarle y de la australiana Pilbara Minerals han bajado una cuarta parte desde noviembre, mientras que las de Allkem se han reducido en torno al 30%.
Sin embargo, Christian Barbier, director de ventas y marketing de Allkem, afirma que la caída de los precios en China «era necesaria» y «útil». En su opinión, la bajada se había visto exacerbada por la lucha entre los fabricantes de baterías del país por su cuota de mercado.
Analistas de S&P Global Commodity Insights que cita Reuters consideran que «es bastante difícil encontrar el mínimo para los precios del litio, porque los productores de litio seguirán siendo rentables a precios mucho más bajos».
Pero en vista de que el mercado del litio cambia, algunos productores han tomado medidas enérgicas. En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó en febrero un decreto para nacionalizar el litio y entregar todas las reservas de mineral del país al Ministerio de Energía.
«Vamos a nacionalizar el litio para que no lo puedan explotar los extranjeros ni de Rusia, ni de China, ni de Estados Unidos, el petróleo y el litio son de la nación, del pueblo de México», dijo en febrero López Obrador. En abril pasado, una reforma de la Ley Minera declaró al litio mineral de utilidad pública. La explotación se cedió en exclusiva al Estado mediante una nueva empresa pública, Litio para México.
