La ASP-B cobra tarifa pública de Puerto Arica ante falta de acuerdo y además aplica reajuste propio

Por Edwin Miranda V. / Activo$ Bolivia / Bolivia Energía Libre-La Paz

Ante la falta de un acuerdo bilateral para que la carga boliviana tenga descuentos en Puerto Arica, la Administración de Servicios Portuarios-Bolivia (ASP-B) se niega a pagar la tarifa pública; pero la aplica en sus costos y además impone un reajuste propio, denunció el gerente general de Terminal Puerto Arica (TPA) Gabriel Tumani, el fin de semana, a través de una nota institucional.

“Por un lado, (ASP-B) dice que no va a pagar la tarifa pública del Puerto de Arica, pero por otro lado en Bolivia la cobra y además les aplica un reajuste propio que encarece el costo de los servicios. Lo que corresponde es que cumpla sus compromisos y pague el valor que ya les cobró a sus clientes”, dijo Tumani citado en la nota.

Debido a esta situación, la empresa chilena anunció que hará cobros anticipados por los servicios que presta.

La propia ASP-B la anunció a sus clientes importadores bolivianos, el pasado 5 de agosto, a través del Comunicado N°6 difundido en su web institucional, que “iniciaba el cobro de la tarifa pública por los servicios de despacho en el Puerto de Arica, dado el vencimiento del acuerdo de descuentos tarifarios el 4 de agosto”, recordó Tumani.

Los altos precios también motivaron reclamos de parte de la Cámara Nacional de Comercio (CNC).

Mientras TPA cobra a la ASP-B por el carguío de un contenedor de 40 pies 40,69 dólares bajo la modalidad indirecto, los empresarios bolivianos deben pagar por el mismo servicio 223 dólares a la entidad estatal. El servicio que ofrece la ASP-B se limita a la emisión de un certificado de importación que exige la Aduana Nacional para que la carga ingrese al país, informó el gerente general de la CNC, Gustavo Jáuregui.

La situación es similar con otros servicios.

Solo en 2019, los empresarios bolivianos movilizaron 58.000 contenedores. Cobrando a un promedio de 41 por cada uno, la ASP-B generó ingresos por 2.3 millones de dólares solo por brindar dos de 23 servicios que TPA ofrece a Bolivia y por los cuales la ASP-B impone tarifas propias, subrayó Jauregui.

Sobre el tema, el gerente general de la ASP-B, Dante Justiniano, respondió: “Hay un sistema, existe una resolución aprobada por la CNC y todos los empresarios, todo siempre se carga, cobramos nuestra tarifa y la tarifa del TPA”, admitiendo así el cobro.

La ASP-B tiene presencia en los puertos de Arica y Antofagasta. Sin embargo, no tiene maquinaria pesada para prestar servicios, tampoco oficinas ya que, por ejemplo, en Arica, el personal tiene como centro de operaciones un contenedor, describió Jáuregui.

Arica se constituye en una terminal estratégica, no solo para Chile, sino también para Bolivia ya que el 75% de la carga que moviliza es exclusivamente boliviana. Solo un 25% tiene origen chileno o peruano, según Jáuregui.

Negociaciones

“No parece razonable que la ASP-B decida no pagar por los servicios que le prestó el Puerto de Arica, si esos servicios fueron cobrados anticipadamente a los importadores con los valores de la tarifa pública a partir del 5 de agosto”, apuntó Tumani,

En respuesta, el gerente de la ASP-B aclaró que pagará lo que debe por los servicios, incluso antes del 20 de septiembre -cuando se cumple un mes- y reiteró su disposición a volver a la mesa de negociaciones lo antes posible para discutir las nuevas tarifas para la carga boliviana de importación.

Por su parte, Tumani instó a la ASP-B a retomar las negociaciones comerciales iniciadas en julio pasado en Arica, donde a través de una Comisión Técnica Comercial se consensuó una propuesta de descuentos tarifarios de largo plazo.