El oro no encuentra techo y supera los 4.000 dólares aupado por fondos y especuladores

El País de España / Agencias / Bolivia Energía Libre / La Paz

  • El nuevo récord histórico llega tras una subida en el año del 50%, la más abultada desde la crisis del petróleo de 1979, gracias a las masivas entradas de dinero en productos especializados.

En plena fiebre por los criptoactivos, cuando en 2023 y 2024 multiplicaron su valor, cundió la idea de que el bitcoin podría llegar a convertirse en el nuevo oro, el activo refugio indiscutible al que asignar de forma obligada una parte de la cartera, por delante incluso del metal precioso. Pero ahora que el mundo está envuelto una vorágine de riesgo geopolítico, con el dólar perdiendo brillo como referencia global, el oro recupera su trono de forma indiscutible. El bitcoin también ha marcado máximos históricos esta semana, con un alza en el año que se acerca al 20%.

El precio del oro, considerado históricamente como un activo refugio en tiempos de incertidumbre, ha superado por primera vez en su historia los 4.000 dólares por onza.

Minutos antes de las 4.00 horas de este miércoles, el metal amarillo ha conseguido alcanzar esta cota y, a las 7.24 horas, marcaba nuevos máximos históricos en los 4.034,65 dólares, según datos de Bloomberg recogidos por EFE.

Durante este 2025, el oro ha ido encadenando sucesivos máximos históricos aupado por las compras masivas de los bancos centrales, la debilidad del dólar y el contexto de incertidumbre política y geopolítica. En lo que va de año, se ha revalorizado más del 50% y se encamina a cerrar su mejor ejercicio desde 1979.

También en las últimas horas el oro ha subido con fuerza, con el mercado pendiente del cierre parcial del Gobierno Federal de Estados Unidos, mientras que Francia vive una nueva crisis de Gobierno.

En declaraciones a EFE, el director de Análisis de Renta Variable de Singular Bank, Nicolás López, ha explicado que la fuerte subida del oro se ve impulsada por las compras de los bancos centrales, en particular los de mercados emergentes, que están reduciendo el peso de sus reservas en dólares.

El director de inversiones en Mutualidad de la Abogacía, Pedro del Pozo, también ha destacado que el oro, y en general los metales preciosos, «están teniendo un auténtico boom». En su opinión, su alza refleja el miedo a la guerra arancelaria, a la guerra de Ucrania o al conflicto de Gaza.

Los analistas de Bank of America ya elevaron hace semanas el precio objetivo del oro hasta los 4.000 dólares por la presión inflacionaria por los aranceles, las tensiones geopolíticas globales y el déficit estructural de Estados Unidos.

Mientras, los expertos de Deutsche Bank mantienen una tendencia alcista del oro, por la fortaleza de la demanda y la caída del dólar, en tanto que los analistas de Julius Baer consideran que las expectativas de nuevos recortes de tipos por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) se han convertido en un factor clave del rendimiento de los precios, impulsando la demanda del este metal y de otros como la plata.