El oro, la plata y el zinc disparan los ingresos fiscales que llegan a más de 5.000 millones de dólares al tercer trimestre del año

Por Bolivia Energía Libre / La Paz

La producción minera registrada, durante el tercer trimestre de la presente gestión, un crecimiento significativo en términos de valor, alcanzando los 5.349,7 millones de dólares, reporta el viceministro de Política Minera, Marcelo Ballesteros.

El zinc, oro, plata, antimonio, wólfram y cobre mostraron incrementos apreciables en su producción valorada en divisas durante el tercer trimestre de 2025, contribuyendo al fortalecimiento de los ingresos del sector, señala la exautoridad que respaldó la información con el registro estadístico oficial del Ministerio de Minería.

Según Ballesteros los datos exponen una evidencia incuestionable: la gestión 2025 registró un incremento del 24% en la producción (de minerales), equivalente a 1.047,9 millones de dólares adicionales respecto al mismo periodo del año anterior. Este resultado confirma una recuperación sostenida y una dinamización significativa del sector, consolidando su papel estratégico en la generación de ingresos y en el fortalecimiento de la economía nacional, apuntó el analista del Ministerio de Minería y Metalúrgia.

Minería, factor estrategico para el crecimiento económico

El sector minero contribuyó, durante los últimos cinco años, con el 4,17% y el 5,40%, respectivamente, al Producto Interno Bruto (PIB), que confirma que la actividad minera es un pilar estructural para el crecimiento económico del país.

De acuerdo con el PIB por actividad económica —indicador que refleja el aporte real de cada sector al dinamismo productivo— la extracción de minerales metálicos y no metálicos registró en la gestión 2024 un incremento de 4,72%, el mayor repunte entre las actividades económicas, refiere Ballesteros.

Las estadísticas señalan que en 2024 las exportaciones mineras superaron los 4.600 millones de dólares, cifra que representa, aproximadamente, el 49% del total exportado por Bolivia. Este desempeño consolida al sector como uno de los principales generadores de divisas, contribuyendo de manera decisiva a la balanza comercial, la estabilidad macroeconómica y la sostenibilidad financiera del Estado, subraya.

El Estado es ampliamente reconocido como un territorio minero por excelencia, esta actividad constituye uno de los pilares más antiguos, persistentes y determinantes de su historia, identidad, economía y configuración política.   Por todo esto, el sector minero es un pilar económico que no puede descuidarse, propone Ballesteros.