Casso vuelve a BoA en medio de cuantiosas deudas que tiene la compañía
Por Edwin Miranda V. / Bolivia Energía Libre-La Paz
Ronald Casso que manejo la empresa los últimos 14 años volvió asumir la gerencia general de Boliviana de Aviación (BoA) en medio de cuantiosas deudas que tiene la compañía aeronáutica, informaron fuentes oficiales.
La empresa no está declarada en quiebra, pero tiene al frente serios problemas financieros.
El exministro de Obras Públicas, Iván Arias, reveló, días antes de dejar la Cartera de Estado, que BoA tenía un déficit de 28.094 millones de dólares por el incremento en los gastos de mantenimiento, salarios, compra de repuestos y de un avión declarado como pérdida total.
Para amortiguar los números rojos de la compañía, el gobierno transitorio de la expresidenta, Jeanine Añez, inyectó 30,6 millones de bolivianos para el pago de los sueldos, mediante el Decreto Supremo 4278.
«La empresa no está en quiebra ni ha estado en esta situación nunca. Este hecho está claramente demostrado, ya que a pesar de las restricciones existentes, ha recuperado más del 50% del tráfico aéreo», señaló en un comunicado la empresa el pasado 17 de noviembre.
Balance en rojo
El golpe más duro que recibió BoA, además de los problemas que ya confrontaba en 2019, fue el cierre de fronteras y la contracción del mercado aéreo nacional e internacional como efecto de la pandemia del coronavirus (Covid-19).
De hecho, esta situación derivó en una reducción de hasta el 93% de tráfico de pasajeros, tomando en cuenta que, de marzo a julio, BoA dejó de transportar 1.3 millones de pasajeros, lo que impactó directamente en una reducción de sus ingresos de más de $us 90 millones, señaló el exgerente de la empresa Eduardo Scott
“La situación es muy grave, puesto que la industria aérea viene cursando la peor crisis económica como consecuencia de la pandemia. El transporte aéreo en Bolivia tuvo una contracción del 98.2%, lo que conllevó a una reducción muy severa de los ingresos. En el caso de Boliviana de Aviación, ésta ha sido y está siendo afectada severamente por la pandemia, principalmente por las medidas de cuarentena asumidas en Bolivia y en los destinos internacionales en los que opera la empresa”, describió el gerente.
A pesar de esta situación y a medida que las restricciones se fueron flexibilizando, se logró incrementar los ingresos de menos de $us 400 mil a $us 4.7 millones al mes de julio, apuntó el ejecutivo que habló con Activo$ Bolivia en la ciudad de Cochabamba.
El exministro Arias informó que los ingresos mensuales de BoA antes de la pandemia, superaban los $us 22 millones. Scott terminó respaldado la cifra.
¿Qué hacer para salvar BoA?
Arias dejó en trámite un proyecto de ley por el cual BoA recibirá un apoyo financiero por Bs 24 MM provenientes del Fondo para la Revolución Industrial Productiva (FINPRO).
Los recursos millonarios, si acaso son aprobados por la gestión del Presidente Luis Arce, servirán para la reactivación de la empresa aérea, adquisición de nuevos aviones y otros ítems necesarios que requiere la compañía para despegar.
«Somos conscientes que la reactivación del sector requiere una serie de medidas financieras y técnico operativas que generen condiciones de mitigación y reactivación progresiva para la recuperación del sector, las mismas que se vienen realizando en BoA mediante medidas financieras y administrativas», dijo Scott a éste medio.
Como parte de la ejecución del Plan de salvataje, BoA accedieron a una reducción del precio del Jet Fuel Internacional de 3,62 a 1,51 el galón, generando un ahorro de 300 mil dólares al mes, coadyuvando a que BoA pueda ser una empresa competitiva a nivel mundial.
Actualmente BoA tiene recuperado el 81% del mercado luego de reiniciar sus operaciones postpandemia.
Se redujeron los costos en el servicio de catering ahorrando 10 millones 200 mil bolivianos con relación a la gestión 2018-2019; asimismo en el Programa de Seguros de Aeronavegación se economizó 1.500.000 dólares.
«BoA con el firme compromiso de integrar a todo el país, llega a los nueve departamentos de Bolivia y conecta a ciudades intermedias», señala el documento y añade que, en el ámbito internacional, opera a Buenos Aires, Sao Paulo, Miami y Madrid, con la intención de ampliar operaciones a México, Lima y Santiago, nuevos destinos que se han visto demorados a causa de la pandemia que llegó a provocar el cierre de numerosos aeropuertos.